Foto por Devi Pride Photography.
Ruby Vasquez
(pronombre: ella)
Soy hija de padres amorosos que trabajaron en los campos, salvaguardaron las tradiciones, sirvieron a los demás y enfatizaron la importancia de la educación y la familia. Estos valores han moldeado quién soy y cómo sirvo a mi comunidad.
Después de obtener una licenciatura en Estudios Estadounidenses con énfasis en Estudios Chicanos y una credencial de enseñanza bilingüe de UC Santa Cruz, comencé a trabajar en el Distrito Escolar Unificado de Pájaro Valley (PVUSD, por sus siglas en inglés) en 1987. Obtuve una maestría en Liderazgo Educativo en la Universidad de Mills en Oakland.
Comencé a hacer danza folclórica mexicana a la edad de seis años. La danza me hizo más consciente de mi herencia cultural y me ayudó a desarrollar un fuerte sentido de orgullo y confianza en mí misma. Me uní en 1987 a Esperanza del Valle (EDV), nuestro grupo local de danza folclórica mexicana para adultos y ahora sirvo como asistente de dirección. EDV promueve el orgullo y la comprensión de la cultura mexicana a través de distintas formas de danzas tradicionales arraigadas en la fusión de herencias indígenas, europeas y africanas.
En 2006 fundé Estrellas de Esperanza, un grupo de danza de más de cuarenta miembros para estudiantes de entre cinco y dieciocho años. Estrellas se compromete a proyectar una imagen positiva de la cultura mexicana y garantizar que los estudiantes regionales aprendan sobre su herencia.
Mi participación va más allá de las artes. Como capacitadora de educación de padres para PVUSD, trabajo con colegas para involucrar a los padres en la educación de sus hijos. Recientemente ayudé a formar la Caravana de Apreciación Campesina de Watsonville, dedicada a los campesinos agrícolas (trabajadores de campo). Al inicio de la pandemia quedaron fuera de la narrativa de los "trabajadores esenciales". Lo que comenzó como una caravana de autos que pasaban por lugares de trabajo agrícolas de la región, con mensajes de agradecimiento en español y en mixteco del sur bajo, se ha transformado en Adopte una Cuadrilla, donde distribuimos equipo de protección personal y artículos para el hogar. Este trabajo, y todo lo demás que hago, se ofrece con respeto a nuestra comunidad local.